Camperizar un coche para viajar por Italia dos semanas y dormir dentro de él una familia de cinco, es una locura. Hace un año de aquella locura que supuso nuestro primer viaje en coche, y... ¡¡qué viaje!!y los que le han seguido han sido también una bendición.
Viajar camperizados nos está llenando "la mochila" de viajes inolvidables, experiencias únicas, nos está llevando a conocer lugares preciosos y nos hace maravillarnos con cada uno de ellos y nos lleva a dar gracias a Dios por la creación, por el sol, por el mar, por los ríos, los montes...
Esta locura de viajar en coche nos hace disfrutar de los placeres de las cosas sencillas, poder leer un buen libro rodeado de los tuyos mientras contemplas la naturaleza a tu alrededor, poder desayunar un café calentito al amanecer, te hace saborear los últimos rayos de sol, te hace darte cuenta qué poco necesitamos para ser felices y cuántas necesidades superfluas nos creamos muchas veces....